El otro día cayó en mis manos un artículo de moda, del ABC, que hablaba con toda ingenuidad de la "moda sanguinolenta" mostrando dos imágenes: una de una pasarela de modelos, sensual e impregnada de sangre artificial; y otra de una cantante en su espectáculo con las mismas características.
Las fotos estaban en la edición de papel; por ahora google no la muestra en su búsqueda rápida, por eso he incorporado esta imagen de "joyas sanguinolentas".
¿Satánico espectáculo o pura frivolidad? Espero que sea sólo frivolidad, pero el reclamo que ofrece es subliminalmente muy violento y rememora el efecto del "sacrificio humano" unido a la dimensión orgiástica del paganismo.
No pensaría mal si no fuese este el siglo de la cultura de la muerte, de los millones de niños que no han llegado a nacer sacrificados al dios de la comodidad y del egoísmo, sacrificios que no quieren mostrarse; y, quizá, esta moda sanguinolenta muestra al desnudo y descarnadamente una falta de sensibilidad paulatina a lo que es el valor de la vida humana.
frid