jueves, 16 de septiembre de 2010

No es libre el que no se entrega

Leyendo textos de San Josemaría Escrivá, me ha impactado éste que pongo a tu consideración:

"Nada más falso que oponer la libertad a la entrega, porque la entrega viene como consecuencia de la libertad. Mirad, cuando una madre se sacrifica por amor a sus hijos, ha elegido; y según la medida de ese amor, así se manifestará su libertad. Si ese amor es grande, la libertad aparecerá fecunda, y el bien de los hijos proviene de esa bendita libertad, que supone entrega, y proviene de esa bendita entrega, que es precisamente libertad" (Amigos de Dios)



Libre es quien elige, y es más libre cuanto mejor es esa elección. El que ama, elige el Amor, y en eso es libre porque ha ejercido su derecho de compra. Ha comprado un boleto con su libertad. La madre en el boleto del matrimonio tiene el fruto de los hijos, que ama como consecuencia de su libre amor.




No hay libertad en la indecisión, hay enfermedad. No es libertad romper los compromisos: cuando se rompe la palabra dada se rompe el jarrón precioso que habíamos construido con las decisiones libres que habían sido de amor.

1 comentario:

  1. El texto está recogido en una selección publicada por Andrea Mardegán, titulada "Una libertad para ser vivida" (textos de Josemaría Escrivá de Balaguer); Colección Milenio, Madrid 2010

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